El coito sentado es un acto sexual donde la mujer toma la posición superior pero permanece inmóvil durante varios momentos o incluso minutos. Esto puede combinarse con que ella se levante, haga una pausa por un mínimo de 10 segundos y luego descienda gradualmente, permitiendo que su calor interno sea más perceptible. Este fetiche particular a menudo requiere un coito prolongado y de ritmo lento.